Cuando entrábamos por la puerta del hotel ya eran las 12,30 de la noche. O las 00.30, que daba igual, porque estábamos igual de cansados 😅

Y aquí viene el asunto….

Le damos todos los pasaportes al muchacho de la recepción, y tras observarlos un buen rato -que se nos hizo mas largo de lo normal-, nos suelta así, a bocajarro:

-“Necesito ver las actas de matrimonio de todos”

😳

Qué puñetas?

Pero qué dice este tío?

Espera, que le voy a preguntar otra vez que parece que no me he enterado….

Y le digo muy amablemente: 

“Perdón, no le he entendido bien… Qué dice que necesita?”

Y me contesta sin mirarme … 

-“Las actas de matrimonio de todas las parejas… sin eso no podrán alojarse aquí”

Quéeeeee???

Pero qué dice este tíooo ???

-“Oiga, oiga, no puede ser eso.. estamos en el siglo XX!, a  punto de empezar 2023, y usted nos está diciendo que si no le presentamos las actas de matrimonio no podemos dormir aquí?.. Vamos hombre!!!! “

A eso que  claro, los demás me están viendo poner cara de “esto no puede ser” y me preguntan qué está pasando.

Cuando se lo digo a todos, me empieza a dar la risa tonta.

Paso de la sorpresa a la risa loca, de esa que te tienes que ir al baño porque te lo haces encima.

Y muerta de risa le pregunto a mi hija Kenya: 

-“Tú estás casada?”

-“Pero Mamá, que dices?????” 

-Y tu, Roberto, ¿estás casado?”

Todo el mundo se parte, pero sin entender qué es lo que estaba pasando..

-“Los únicos que estamos casados aquí somos nosotros” , dice mi suegro.

Pues eso es verdad.

Entonces me vuelvo al de la recepción y le digo, entre risas y enfado:

-“Escuche, nosotros al hacer la reserva no nos avisaron de esto, no fuimos informados, así que no puede dejarnos a estas horas en la calle, es muy tarde!..  Dénos las llaves de las habitaciones ya, por favor”

-“No posible, siñora” “Si no tienen documento de matrimonio no pueden quidarse”

Pues esta sí que es buena.