Qué alegría!!!  No iba a decirle que la alfombra era para ella hasta llegar a Agadir.

Quería que fuera una sorpresa y tal como iba el día, ya íbamos teniendo suficientes jajaaa

Y allá que nos fuimos:

Ellos dos 👳🏾‍♀️👳🏾‍♂️, la alfombra y nosotras.🧔‍♀️👩‍🦱

Todo en un coche minúsculo.

Ellos no entendían francés ni español. 

O eso dijeron.

Y nosotras, partidas de risa con la aventurita.

Cuando le digo a Corinne…:

“Pues el tuyo no es nada guapo” 😂

Y ella contesta indignada

“El mío? Y por qué el feo es el mio”

Pues porque yo lo he dicho primero y por tanto yo elijo.

Y así todo el camino, a carcajada limpia🤣

De esas veces que lloras tanto de reírte que casi tienes que parar el coche.

Pues así fuimos todo el camino hasta llegar a casa.

Y la llegada fue triunfal: 

En el jardín de la casa, varias personas de su familia viéndonos llegar con los dos maromos y la alfombra. Un show.

Y todavía con las risas, pasamos la tarjeta por la maquinita de la VISA

Les invitamos a un te (la hospitalidad es algo inherente en los que somos de allí) y les llevamos a la parada del autobús para volver a Taroudant.

Nunca supimos si habían entendido algo de las burradas que íbamos diciendo en el coche, pero seguro que sin entenderlo, solo de oírnos reír ya pasaron un buen rato.

Nosotras sí que lo pasamos.

Inolvidable.